Resulta cuando menos curioso que los argumentos «básicos» a los que recurren los autodenominados socialistas y por añadidura vascos, y su entramado mediático, en el asuntillo ese del cuñado del presidente sean de orden, de procedimiento, incluso de… acoso.
Que si se ha filtrado el expediente, que si se trata de una maniobra electoral en pleno año pre-electoral [sic], que si el PNV también tiene asuntillos, que si los funcionarios de la Dipu «forzaron» la investigación del susodicho expediente, que si la abuela fuma… Circunstancias todas ellas, por cierto, radicalmente ajenas a las actuaciones de los autodenominados socialistas en otros casos ni de lejos similares. Por supuesto.
Sin embargo, los hechos, tozudos como son, cantan: Un individuo que acumula unos cuantos cargos y ostenta un alto puesto en la jerarquía de los famélicos sin pan dedió justificar, y no lo hizo, ingresos por valor de 419.074 euros. Por si fuera poco, uno de sus tardíos y parciales intentos de cubrirse las espaldas requiere de un papelito firmado por un prestamista sevillano… a su vez investigado por blanqueo de capitales. De hecho, incluso ese periódico que recibe dinero de las prostitutas lo resalta.
Es lo que tiene cantar la internacional puño en alto más de tres o cuatro veces, que contraes el síndrome Benegas (se te juntan los dedos gordos del pie con la papada), te sale un peluco de cuatro mil euros sin saber de dónde, necesitas bocatas de caviar cada dos horas y, sin comerlo ni beberlo, como si de una erupción cutánea se tratara, te acaece un casoplón hortera en la provincia de Santander.
Pobrecillos.
Hoy es vergonzosa la coincidencia de la prensa adicta al régimen pakorrista. Tanto que da risa o pena. Gastaca se casca un puerro lacrimógeno en El País (casi comparable a su ya célebre «a patxi López le duele el socialismo, así de simple) tratando se sugerir que el pobre Gil tuvo que hacer un esfuerzo titánico para construir ese chalet como herramienta teraopeútica para recuperar a su hija que estaba enferma. Luego habla ´de las «filtraciones» olvidándose del caso watergate y de lo que significó para el periodismo libre y por supuesto de lo que él mismo hacía cuando quedaba cada semana con el fiscal de la casa para que le fuese instruyendo sobre como iba lo del caso Miñano y escribir páginas y páginas animado por la jacarandosa tertulia que almuerza periódicamente en Ajuria Enea para tratar de enderezar los sociómetros. En eso se repartía el papelillo con otro ilustre Alberto Ayala. Nada sobre lo grave que resulta que un tipo como gil no pueda justificar la chorradica de 400.000 euros y encima para que se mueva por ahí desprendiendo billetes de 500.. Penoso igualmente el arrechucho que le entra al Txelu Zubizarreta en el diario que reflotó la Falanje y ese demócrata llamado Pako Franko, mangandole la rotativa al «Euskadi» y entregándosela en bandeja a este ilustre rotativo . Tres cuartos de artículo para insultar a la diputación de Bizkaia sin plantearse siquiera que la filtración ha llagado del mismo lugar que vino la del caso Miñano y unas pocas líneas para decir que la cazada del cuñadísimo parece grave. Y curioso, ninguno de los defensores de esta ya antiguo régimen habla de las diferencias entre ambos casos. Los imputados en el caso Miñano fueron cesados fulminantemente. Gil (y Gil) siguen mandando. Con lo fácil que sería resolver este asuntillo con unos bolsillos de cristal, ¿eh? Así les va y peor que se les van a poner las cosas, porque las novelas río, reales como la vida misma, no han hecho más que empezar. Y si no, al tiempo.
Además, parece ser que cuando este señorito se dedicaba a recibir ingresos extra injustificados era la época de las campañas (que él mismo dirigía) del «cambio», los «nuevos aires en Ajuria Enea», «mirar debajo de las alfombras», «abrir las ventanas», etc.
¿Nos estaba mintiendo a la puta cara? ¿Nos quería engañar? ¿Tomaba por gilipollas a sus votantes? ¡Imposible!: ¡Es de izquierdas!