Laurita la cuentacuentos

Por si mañana no estoy inspirado, voy a publicar ahora mismo esta entrada. Laura Mintegi, la candidata de Batasuna con el “consenso” de Urizar, Zabaleta y Matute, se empeña en contarnos una de vaqueros tras otra, y eso que sólo lleva 48 horas como cabeza de cartel de Joseba Permach.

Hasta tal extremo tiene problemas de verborragia que se permite el lujo de descalificar al “Mandela vasco”, al Gran Gurú y mártir oficial de la IA, Arnaldo Otegi, “porque es un hombre de Partido” y “por eso no es el más idóneo como Lehendakari”.

Bueno, en principio hasta que no se cuenten los votos aquí Lehendakari no es nadie –Pachi López jamás ha sido Lehendakari, es más, ni él mismo se lo ha creído jamás-, pero lo que no puede ser, Laura, es que nos vengas con la milonga de que “te sientes muy cercana a las distintas ‘sensibilidades’ que conforman EH Bildu.

Precisamente tú, ortodoxa entre las ortodoxas, históricamente militante de la Herri Batasuna de los años de plomo, candidata de Amaiur en las Generales de 2011 y, lo que es peor, candidata de HB en las europeas de 1987 y las de 1989 no puede pretender presentarse como un “mirlo blanco” que aúne sensibilidades. La elección oscurantista, clandestina y a puro dedo de Laura Mintegi responde única y exclusivamente a la voluntad de control absoluto de Herri Batasuna, ahora que ya no tienen por qué rascar el fondo del barril, presentando y copando los puestos de las listas electorales con los fieles ortodoxos y obedientes.

Otra cosa es que el subidón que le ha producido el SMS de Joseba Permach haya sido de tal calibre que le haya producido una auténtica hipertrofia del ego, permitiéndose el lujo de menospreciar al Sagrado Fetiche represaliado de la IA, Arnaldo Otegi, algo que ha provocado una auténtica marejada dentro de la IA “tradicional”.

Desde luego, cuando se está acostumbrada a hablar ex catedra, cuando hasta los mismos que decían que tus libros estaban plagados de errores gramaticales garrafales y denotaban una pobre estructura narrativa -que eran una mierda, vamos, hasta tal punto que tuvo que ser la propia editorial quien corrigiese las sucesivas ediciones- luego se desdicen de sus palabras, no sabemos si ilustrados por la visita de algún que otro Hombre de Negro, cuando en definitiva se está acostumbrada a salirse de rositas en todo lo que dice o escribe y a que todos meneen la colita cada vez que abres la boca, se corre el riesgo de perder el contacto con la realidad y creerse las propias mentiras: Que tu “elección” ha sido “democrática”; que no eres una sectaria fiel de Herri Batasuna; que los votantes de Aralar, EA y Alternatiba te adoran y que eres lo mejor desde la invención del inodoro.

Y que todas esas salidas de tiesto van a ser aplaudidas por la nomenklatura de la IA, no digamos por las bases y los simpatizantes de EA y Aralar que se encuentran ahora mismo perdidos en su figura de convidados de piedra, tontos útiles y callados como putas (no te importará la ductilidad cromática del lenguaje, ¿verdad? Al fin y al cabo estamos entre juntaletras…) cuando en otras circunstancias y otras coaliciones peleaban a navajazos los puestos y las designaciones, manteniendo la incógnita de aceptar ir en coalición hasta el último minuto.

Enhorabuena. No sé si se debe a algún complejo de Faulkner o a que te crees J. R. R. Tolkien inventando el lenguaje élfico, pero hay que reconocerte el mérito, inalcanzable hasta para Pachi López, de no haber dicho una sola verdad desde que te presentaron en esa rueda de prensa patética por lo cobarde, en la que no aceptaste preguntas de la prensa porque aún no te habían dicho qué contestar a la pregunta de cómo habías sido elegida candidata.

Pero hay que reconocer que cuando te sales del guión eres capaz de fastidiar a la IA al menos tanto como yo, y eso es un mérito al alcance de pocos.