Urkullu es el riesgo, más que Bildu

Lo ha dicho Antoñito Fachagoiti en el ABC, y lo lleva repitiendo cada vez que le ponen un micrófono delante.

En el PP saben bien con quién se juegan los cuartos, porque lo han podido comprobar en sus carnes en las sucesivas negociaciones que el Partido ha llevado con el gobierno español. Saben que EAJ ni renuncia a sus principios, por más que los que aún tienen que demostrar su abertzalismo embadurnen nuestros carteles y nuestros pueblos con demagogia de perdedores “PNV español”, ni se ha desviado un ápice de sus objetivos fundacionales: la soberanía plena de la Nación Vasca, Euzkadi, en Europa y en el mundo, y la libertad y el bienestar para todos los vascos.

Por eso España teme a EAJ-PNV, y no a los voceras de Bildu: sabe perfectamente que Bildu, la IA, está domesticada mientras no se arregle la situación de los presos y no se alcance un acuerdo para gestionar la rendición incondicional de ETA. Rendición incondicional que la IA camuflada en Bildu no puede admitir públicamente, por eso su objetivo es erigirse en interlocutor privilegiado con España, para maquillar su fracaso histórico, su inanidad política, su apuesta ruinosa por el bolchevismo revolucionario y por una guerra contra todo y contra todos –contra los que no les hemos bailado el agua a estos iluminados también- que ha supuesto décadas de retroceso en la construcción social y nacional vasca, la legitimación del unionismo, el descrédito internacional de la causa nacional vasca y tres generaciones engañadas, utilizadas, manipuladas y arruinadas por una secta destructiva –el MLNV- que ha vivido y vive aún en sus mundos de Pinky-winky porque la realidad es demasiado jodida como para aceptarla.

Por eso y para eso piden el voto en estas elecciones: por su pura y simple conveniencia. No para sacar a Euzkadi de la crisis, ni para trabajar por solucionar los problemas sociales de los vascos. No. Su objetivo es gestionar la rendición lo mejor que puedan, generar ingresos para su Movimiento y preparar puestos de trabajo para los presos que puedan ser liberados, aunque eso signifique vaciar los presupuestos públicos, elevar los impuestos a los ciudadanos, llenar las calles de mierda o dejar en la calle sin medios de subsistencia a trabajadores veteranos simplemente porque necesitan sus puestos de trabajo para los suyos.

Y si para conseguir todo eso tienen que recurrir a la intimidación, el chantaje y la amenaza, lo hacen.

A esta gente, a este movimiento sectario, montado para que los dirigentes de la nomenklatura vivan como dios a expensas de los borregos que se tragan su propaganda, Euzkadi, el Pueblo Vasco, su futuro y bienestar se la trae al pairo. Cada voto a esta gente es un voto contra la recuperación económica, contra el futuro de los vascos y vascas, contra el empleo, la industria, el comercio y la reactivación social y laboral. Es un voto contra la independencia de Euzkadi.

No es más que un voto a favor de que los cuatro enchufados de siempre del MLNV puedan salvar la cara y continuar con su negocio. Y el PP y Basagoiti lo saben, por eso no les tienen miedo.