La pasada semana, la diputada Larraitz Ugarte compareció en las Juntas Generales para dar cuenta de las facturas de Bidegi, esas que primero dijo no encontrar para a continuación decir que las había encontrado y que procedería a su auditoría. Como las cuentas de Bidegi estaban bien, tal y como certificó la empresa independiente contratada por la propia Ugarte, la diputada echó mano de la manipulación a cuenta de los gastos de representación para descalificar al adversario político.
Los gastos de representación existen en todas las instituciones. También en las que gobierna Bildu. Sólo para 2013, el diputado general Garitano dispone de 161.025€ en ese concepto y suele ir destinada principalmente a los gastos protocolarios. Todos recordamos el desagradable comienzo de legislatura de Larraitz Ugarte cuando un grupo de la oposición desveló que cobraba ayudas sociales mientras trabajaba en la UPV y era propietaria de dos viviendas y tres coches.
El PNV no participó en dicha campaña y aceptó las explicaciones que dio. Sin embargo, desde entonces Ugarte ha invertido más energía en atacar al PNV, que en mantener adecuadamente las carreteras. Su actitud recurrente da la medida de la paranoia en la que está sumida la Izquierda Abertzale, quien para la venta de lo que considera su “modelo propio” requiere de la recreación de un modelo al que combatir, porque su modelo no resulta ni siquiera reconocible para la mayoría de los gipuzcoanos.
Hala, dedicado a la «morritos»:
Morritos la pesetera, que incluso recurre a la ayuda de la justicia ESPAÑOLA para llenarse un poco los bolsillos. como buena suzialista preocupada por llenar los bolisillos propios. Morritos Larraitz BILDUKAKA ESPAÑOLAZA.
Este personaje tiene varios problemas, pero el más importante de todos es su brutal incompetencia. No sabe ni por donde le da el aire. Imaginaos una «enginiera» como Patxilo que es la responsable de carreteras y no tiene ni idea de que es la fuerza centrífuga, que no ha oido jamás hablar de qué es un sistema de fuerzas y que cuando lee «vector» piensa que han escrito mal «Victor». ¡Me consta que hay verdaderas carcajadas en el departamento que dirige cuando se descuelga por allí con una nueva «ocurrensia»!
Los de bildu…una gente entregada y encantadora…sin animo d lukro!!!! Joderos