«No los queremos, no los necesitamos» dijo el comandante de la revolución cubana en el año 1980 frente al puerto de Mariel, dejando salir gente de las cárceles para que se fueran a Estados Unidos junto a verdaderos exiliados que querían salir del régimen comunista de Cuba. Y una y mil veces debemos repetirle a la banda terrorista surgida en Euzkadi, y que lleva ese y no otro topónimo en su nombre, que ni les queremos ni nunca les hemos necesitado. Y que su historia no la pueden contar (sólo) ellos. Porque nosotros sabemos, como nos dijo nuestro Lehendakari Agirre en el mensaje de Gabon de 24 de Diciembre de 1939, a pesar de todo lo sufrido y por sufrir, no albergar odio a nuestros enemigos, ni basar en la violencia o el odio cualesquiera proyecto de futuro. Y es que la no-violencia practicada por EAJ-PNV y EGI nunca fue una actitud pasiva, sino un mandato ético que provenía de nuestros mayores, Agirre, Leizaola, Ajuriaguerra, Landaburu o Irujo.
Ahora sale el Pater de Leitza a decirnos dos cosas. Una primera, que la banda terrorista surgida en Euzkadi el día de San Ignazio de 1959, debe poder seguir existiendo en el futuro, desarmada civil, «como el IRA en Irlanda». Y una segunda, que la renovada Izquierda Abertzale debe subsumirse en una estructura de carácter unitario, del tipo de la HB de los años 80 del siglo XX. Ambas tienen y merecen ser comentadas. La primera, que en Irlanda el primitivo IRA siempre fue un ejército al servicio de un partido político. La política tenía el poder y el mando, todo lo contrario que en el caso vasco. Y añadamos que de las diversas escisiones que ha tenido en su historia el IRA, aún hay ramificaciones en activo, que este mismo año 2014 han ejecutado actos terroristas. Otra cuestión es que ambas comunidades hayan llegado a un punto de «asumir» las consecuencias desde la ley, y perseguirlas con la ley, vengan de donde vengan. Y han acometido el desarme. Y los criminales sin castigo serán perseguidos. Y, si, el IRA mayor, como tal, no se ha disuelto. Quieren algo parecido? Sencillo. Que ETA se desarme, se disuelva como organización terrorista, se «desmilitarice», se «civilice» y, aquellos, según su terminología, «ex-combatientes» que quieran seguir bajo el paraguas de ETA que cojan el Baluarte en Iruñea para unos días, hagan un congreso, funden una asociación con el mismo nombre, con sus estatutos, los llevan a que se los sellen en el registro de asociaciones del Gobierno Vasco y del Gobierno de Navarra, y listo. Seguro que saben donde están, porque, por ejemplo, Mugarri es la cervecería que hay enfrente de la delegación del Gobierno Vasco en Bilbao, y donde, tal vez, hicieron la ponencia del citado nombre. Lo tienen sencillo, ahí tienen su camino. O eso, o se van al registro de partidos políticos y se apuntan como un partido más. Aunque no es recomendable. Porque la sociedad vasca está harta de que una organización criminal y terrorista que jamás debió haber existido, que nunca la quisimos y nunca la necesitamos, que repetidamente nuestros mayores siempre han combatido, y que el mismo señor veleta, Telesforo de Monzón, aristóicrata luego comunista, de recios modales, y monárquico en los años 40 en conjunción con Indalecio Prieto en la figura del llamado «Don Juan», el que pactó con el dictador Franco la educación de su hijo en 1948 … ponía en un lado la ideologia jelkide como uno de los pilares de la sociedad vasca, y del otro, el discurso etista. Si, el de ETA. Pues el brazo político nace 20 años después del brazo armado.
Antes de abordar la segunda cuestión cabe recalcar que la cuestión de la PAZ, del proceso de PAZ, de NORMALIZACIÓN, está, sobre todo, fundamentalmente, del tema de los llamados «presos», del lado del estado español. Y del estado francés. Por más voluntad que le puedan echar las autoridades vascas, es una cuestión que no pueden resolver por sí. ¿O es que se niegan a reconocer los intentos de solución que han habido en este tema de tantas y tantas personalidades, Ardanza, Atutxa, Arzalluz, Balza, Agirre, Azkarraga, Errazti, Ibarretxe y tantos otros, estrellándose contra las negativas de Aznar y Rajoy, pero también en la de Gonzalez y Zapatero, empezando por la negativa a cumplir el estatuto en materia de prisiones? Si hubiera que cantarle las cuarenta a alguien, la lógica podría llevar al señor Mintegi, rector del departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Araba, enfrentándose al estado y negándose a la instalación de la cárcel de Zaballa, en Araba, que tendrán su papel en una hipotética agrupación de «presos». Era de Eusko Alkartasuna. Por comentar. Y es que hay una verdad incontrovertible: los llamados presos de ETA son, además de presos de sus crímenes, y, por tanto, de los estados francés y español, son presos … de la propia ETA, a través de sus tentáculos, convirtiendo en presos también a sus familiares, a los familiares de los presos. Aquí hay mucha literatura, y Txindoki, por ejemplo, sabe mucho de que es lo que ha pasado, y cuanto debe cambiar para normalizar su futuro. Por lo tanto, usar el tema de presos como arma arrojadiza es una cuestión antigua, recurrente … y además, como tantas otras cosas, esquizofrénica. Pues quieren implicar a los demás, pero siempre sacando ellos los réditos. Y es por esto, sólo por esto, por lo que quieren hacer el sorpasso dichoso en Euzkadi a su gran e histórico enemigo: EAJ / PNV. Por la Independencia? No! Por los presos. Para negociar ellos con el estado el asunto de «sus presos». Quede claro y diáfano el asunto.
Segunda cuestión. La llamada Izquierda y por añadidura Abertzale, es decir, Herri Batasuna, de toda la vida, cuya bandera primigenea era en blanco y negro, pues así ven este gran país, Euzkadi, o en blanco o en negro, sin tener en cuenta la diversidad de colores, dice el que fuera enfant terrible como fundador de Aralar, Patxi Zabaleta, el traidor, que debe ir hacia una confluencia. A unas estructuras unitarias. Como pasó con Herri Batasuna. De momento, como ya adelantamos en su momento, eH Bildu se ha inscrito en el registro de partidos. Como una federación de partidos, tal y como es Convergencia i Unió, según el parlamentario y miembro numerario del OPUS Rafa Larreina. Patxi Zabaleta habla de Herri Batasuna, donde confluyeron varios partidos que fueron disueltos uno tras otro bajo la «pistola» de Josu Muguruza. Si, fue asesinado por las cloacas del Estado. Y eso no lo hace bueno. Lo convierte en una víctima. Ni más ni menos. La progresiva supresión de la voluntad de EA, Aralar o ALternatiba dentro de eHBildu está claro desde el momento en el que fallan las cuestiones organizativas y comunicativos. Cuando se pierde la capacidad de organizarse, de funcionar como partido independiente, cuando se es incapaz de lograr votos que den representación institucional, uno se enfrenta a dos posibles salidas: una, el suicidio honorable, con las ideas propias, pero a la muerte. O a un status similar al Partido Karlista de Euskal Herria. Otra, la segunda, es juntarse con otro para que maquille y oculte este fracaso estratégico organizativo. Y es el que EA, Aralar y Alternatiba han asumido. Porque ya es imposible e inviable que se pudieran presentar a unas elecciones con sus propias fuerzas (sic). Aunque tomaran para si la marca Bildu o eH Bildu, y Sortu por su lado. Algo que ya han declarado que no va a suceder. Sortu nunca fue una marca electoral. Y ante esto, que escenario sería el que nos avocamos políticamente … pues retroceder exáctamente 30 años. Hasta 1984, pero con un cambio significativo. A diferencia de 1984 EAJ / PNV es un partido firme, con ideas, proyecto, país … y cohesionado como un sólo hombre o mujer, sabiendo que hay casi 31 000 almas dentro de sí. Cada afiliación es un alma que late por Euzkadi. Y enfrente volvemos a tener la misma Herri Batasuna de siempre. En proceso aún de recomposición, pero que tiene las mismas formas que entonces, el mismo manejo del lenguaje, los mismos «chicos de la gasolina» en las calles … y con unos compañeros de viaje que entonces, en buena medida, los tenía enfrente. Y yo me digo, que si el Lehendakari Juan Karlos Garaikoetxea dijo que en 1986 si Eusko Alkartasuna no hubiera nacido hubiera habido que inventarla, si en el año 2000 Patxi Zabaleta separó formalmente la corriente Aralar como partido … ante la perspectiva de sólo dos movimientos abertzales (del Sabiniano término Aberri, tan Sabiniano como el propio Aberri Eguna), es decir, EAJ / PNV y HB … ¿no sería una traición a Euzkadi? ¿Merecía la pena esas alforjas para el escenario resultante?
Euzkadi es la patria de los vascos. Y esa patria se estructura en paz y en libertad. Sin tutelas armadas, en democracia. A ello sólo cabe decir algo que no es sino repetir nuestras palabras para que no se pierdan: Bakea behar dugu, ETA Kanpora!